Reformas en comunidades de vecinos: lo que debes saber en 2025

Reunión vecinal para decidir sobre obras en el edificio.
Las reformas en comunidades de vecinos generan muchas dudas: ¿es necesario que todos los propietarios estén de acuerdo? ¿o basta con mayoría simple? La respuesta depende del tipo de obra, ya que la Ley de Propiedad Horizontal establece diferentes niveles de consenso en las juntas de propietarios.
Conocer esta normativa es clave para evitar conflictos y agilizar los proyectos, desde una rehabilitación energética hasta la instalación de un ascensor.
Tipos de mayorías en las juntas de vecinos
La Ley de Propiedad Horizontal diferencia varios niveles de votación para aprobar obras en comunidades de vecinos:
- Unanimidad: todos los propietarios deben votar a favor.
- Mayoría cualificada (3/5 partes): se necesita el apoyo de una amplia mayoría.
- Mayoría simple: basta con que más de la mitad de los propietarios asistentes voten a favor.
- Sin acuerdo previo: en algunos casos la ley obliga a ejecutar la obra sin necesidad de votación.
Obras que requieren unanimidad
Las reformas que afectan a la configuración esencial del edificio o a su título constitutivo requieren unanimidad. Por ejemplo:
- Cambio en la estructura del edificio.
- Alteración de elementos comunes esenciales.
- Modificación de estatutos de la comunidad.
Un caso práctico: si la comunidad quiere convertir la azotea en viviendas (como se explica en nuestro artículo sobre la casa en la azotea), necesitará unanimidad.
Obras que necesitan mayoría cualificada (3/5)
Algunas reformas exigen una mayoría reforzada, como:
- Establecer o suprimir servicios comunes (portería, conserjería, vigilancia).
- Arrendamiento de elementos comunes que no tengan uso específico.
- Instalación de energías renovables compartidas, como placas solares comunitarias.
Este tipo de proyectos se relaciona con el auge de los distritos energéticos en Europa y el impulso hacia edificios más sostenibles.
Obras que se aprueban por mayoría simple
Las decisiones más habituales en comunidades suelen resolverse con mayoría simple, como:
- Contratar servicios de mantenimiento.
- Pequeñas reformas en zonas comunes (portales, pintura, iluminación).
- Instalación de puntos de recarga para vehículos eléctricos en plazas privadas (cuando el coste lo asume el propietario).
Obras que no requieren acuerdo
Existen casos en los que la ley obliga a ejecutar la obra, sin necesidad de votación:
- Instalación de ascensor para garantizar la accesibilidad.
- Reformas necesarias para cumplir con la normativa vigente de seguridad o eficiencia energética.
- Actuaciones urgentes de conservación y reparación.
De hecho, el BOE sobre la Ley de Propiedad Horizontal deja claro que este tipo de actuaciones son obligatorias y deben realizarse aunque algunos vecinos se opongan.
Cómo evitar conflictos en las decisiones vecinales
Para que una reforma en comunidades de vecinos no se convierta en un problema:
- Convoca siempre la junta con la información técnica y presupuestaria detallada.
- Consulta a un arquitecto o técnico que certifique la viabilidad de la obra.
- Busca ayudas públicas, como las subvenciones de rehabilitación energética, que pueden reducir la carga económica.
- Explica los beneficios de la obra en términos de ahorro y revalorización del inmueble.
Preguntas frecuentes (FAQ)
¿Se puede impugnar un acuerdo de la comunidad?
Sí, cualquier propietario disconforme puede acudir a los tribunales en el plazo de 3 meses.
¿Qué pasa si un vecino no paga su parte de una reforma aprobada?
La comunidad puede reclamar la deuda judicialmente con intereses.
¿Se pueden hacer obras en elementos comunes sin permiso?
No. Cualquier actuación sobre elementos comunes requiere acuerdo en junta.
¿Qué ocurre si un propietario no asiste a la reunión?
Se le notifica el acuerdo y tiene 30 días para manifestar su oposición.