Arquitectura sostenible en Colombia 2025

Barrio colombiano con integración de soluciones sostenibles, como techos verdes y ventilación natural. Imagen generada por IA.
En 2025, la arquitectura sostenible en Colombia se posiciona como una prioridad clave en el desarrollo urbano. En un país tan diverso en climas y territorios, construir con criterios ecológicos ya no es una opción, sino una necesidad. Por ello, cada vez más proyectos buscan reducir el impacto ambiental, mejorar la eficiencia energética y brindar calidad de vida mediante soluciones sostenibles.
Normativa y políticas públicas para la arquitectura sostenible en Colombia
Uno de los mayores impulsos proviene del marco normativo. La Resolución 0194 de 2025 del Ministerio de Vivienda establece nuevos requisitos obligatorios de sostenibilidad para edificaciones nuevas. Así, se exige ahorro de agua, eficiencia energética y resiliencia ante el cambio climático (Minvivienda).
Estas medidas representan un avance para el país, alineando la normativa nacional con estándares internacionales y fortaleciendo la planificación urbana sostenible.
“La arquitectura debe ser una herramienta de justicia social y adaptación climática”, afirmó Catalina Velasco, ministra de Vivienda (2023).
Además, programas como Mi Casa Bella en Cali o Ahorro para mi Casa en Bogotá integran la sostenibilidad como criterio clave para acceder a subsidios. También se ha promovido la capacitación técnica a comunidades constructoras, fortaleciendo la autogestión y el uso eficiente de materiales locales.
Materiales sostenibles en la arquitectura colombiana
Los materiales sostenibles no solo benefician al planeta. También mejoran el confort térmico y reducen los costes a largo plazo. En Colombia, destacan tres grandes líneas:
- Materiales tradicionales mejorados, como la guadua y el bahareque.
- Materiales reciclados o certificados, como el hormigón reutilizado o la madera con sello FSC.
- Soluciones innovadoras como el hempcrete o «hormigón de cáñamo», que destaca por su bajo impacto ambiental y buen aislamiento.
Según Leaf LATAM, el uso de estos materiales puede reducir el consumo energético de un edificio hasta en un 40 %. Este dato es especialmente importante en zonas de temperaturas extremas como los Llanos Orientales o las regiones frías de Cundinamarca, donde el aislamiento térmico permite un ahorro sustancial.
Arquitectura urbana sostenible: casos reales y estrategias locales
Ciudades como Medellín, reconocidas por su innovación urbana, lideran proyectos sostenibles en barrios vulnerables. La integración de espacios verdes, techos solares y sistemas de captación de agua en viviendas sociales ya es una realidad. Además, el urbanismo táctico gana protagonismo al transformar calles infrautilizadas en corredores verdes y puntos de encuentro.
En Medellín, la planificación urbana sostenible avanza con propuestas como el concepto de Barrios Vitales, orientado a revitalizar comunidades a través del mejoramiento del espacio público, la infraestructura peatonal y la creación de corredores verdes. Aunque el programa original no tiene enlace oficial activo, su enfoque sigue presente en el Plan de Desarrollo Distrital 2024-2027, donde se promueve una ciudad más habitable, resiliente y socialmente inclusiva. Además, documentos técnicos como el plan estratégico de Barrios Vitales permiten conocer el enfoque metodológico adoptado en estos procesos de transformación urbana.
También crece el interés en tecnologías como los edificios que capturan CO₂, una solución prometedora para centros urbanos densos como Bogotá. Estos avances se relacionan con tendencias analizadas en invertir en vivienda en Colombia 2025, donde la sostenibilidad influye cada vez más en las decisiones de compra.
Educación, tecnología y participación en la arquitectura sostenible
Las universidades y centros de innovación, como la Universidad Nacional y la Pontificia Universidad Javeriana, han sido clave en el desarrollo de soluciones arquitectónicas sostenibles. Desde simulaciones térmicas hasta ensayos de materiales locales, estas instituciones aportan conocimiento técnico de gran valor.
En regiones como la Costa Caribe, el diseño bioclimático se ha posicionado como respuesta eficiente al calor y la humedad. Arquitectos locales incorporan ventilación cruzada, techos altos y materiales frescos como el adobe tratado o la teja de palma.
El Gobierno ha lanzado un plan piloto en el Amazonas para construir viviendas autosuficientes con paneles solares y captación de agua de lluvia, adaptadas a la alta pluviosidad y dificultad logística de la región.
Según datos del DANE, la construcción sostenible representa ya el 7 % del total de nuevas edificaciones en Colombia, un crecimiento sostenido desde 2020.
“Colombia tiene el potencial de liderar en América Latina si integra sostenibilidad con inclusión social en sus proyectos urbanos”, señala Carlos Felipe Pardo, experto en urbanismo sostenible.
Herramientas tecnológicas
Herramientas como BIM (Building Information Modeling) permiten planificar edificios más eficientes desde la etapa de diseño. Esto reduce errores, costes y desperdicios.
Iniciativas como Hábitat para la Gente en Bogotá aplican principios de sostenibilidad con fuerte participación comunitaria, generando apropiación y permanencia del cambio. Desde el ámbito financiero, organismos como el BID y la CAF destinan fondos específicos para infraestructura verde en ciudades colombianas.
Universidades como la de los Andes han incorporado programas de arquitectura sustentable, formando a una nueva generación de profesionales comprometidos con el entorno.
El rol de la mujer también está creciendo en este campo. Diversos colectivos de arquitectas impulsan una visión integradora del hábitat sostenible, especialmente en zonas rurales.
Conclusión: Colombia como referente en arquitectura sostenible
En definitiva, la arquitectura sostenible en Colombia no solo es una tendencia, sino una transformación necesaria. Con políticas activas, materiales responsables y una creciente conciencia colectiva, el país se perfila como referente regional.
El reto ahora es escalar estas buenas prácticas a todo el territorio, con una visión de inclusión, resiliencia climática y justicia social.
Así como otros países avanzan hacia una rehabilitación energética integral, Colombia tiene la oportunidad de liderar un modelo propio, adaptado a su diversidad. Esta transformación requerirá un esfuerzo conjunto entre instituciones públicas, sector privado, academia y ciudadanía. Pero si se consolida, el país no solo construirá ciudades más verdes, sino también más justas y habitables para todos.
Preguntas frecuentes
La arquitectura sostenible en Colombia es un enfoque constructivo que busca reducir el impacto ambiental, mejorar la eficiencia energética y adaptarse a los diversos climas del país mediante el uso de materiales ecológicos, diseño bioclimático y tecnologías limpias.
Entre los materiales más utilizados destacan la guadua, el bahareque mejorado, el hormigón reciclado, la madera certificada y nuevos compuestos como el hempcrete. Estos reducen el consumo energético y mejoran el confort térmico.
Medellín, Bogotá, Cali y Barranquilla lideran con proyectos de vivienda verde, urbanismo táctico, rehabilitación energética y barrios con tecnologías limpias como paneles solares o captación de agua de lluvia.