¿Qué hay detrás de los 1.325 MW renovables con almacenamiento que AES Andes construye en Antofagasta?
En Antofagasta, AES Andes apuesta por energía renovable con almacenamiento. Un proyecto de 1.325 MW que cambiará el futuro.

Imagen generada con IA – AES Andes Antofagasta energía renovable con almacenamiento
Un nuevo paso en la transición energética de Chile
La empresa AES Andes Antofagasta energía renovable con almacenamiento ha dado un paso decisivo en su estrategia de descarbonización con el inicio de la construcción de dos megaproyectos en Antofagasta, denominados Pampas y Cristales. Estas iniciativas suman 1.325 megavatios (MW) de capacidad instalada, combinando generación solar, eólica y sistemas de baterías que aportarán flexibilidad y seguridad al Sistema Eléctrico Nacional.
La inversión, que supera los US$ 1.100 millones según La Tercera, representa una de las mayores apuestas renovables del país en 2025. Según la compañía, la electricidad generada será capaz de abastecer el consumo equivalente de más de 780.000 hogares chilenos, consolidando el papel de la Región de Antofagasta como epicentro energético de Latinoamérica.
Este movimiento no solo responde a la urgencia climática global, sino que también refuerza el liderazgo de Chile en la adopción de energía renovable con almacenamiento, un segmento que está creciendo con rapidez en mercados como Estados Unidos y Europa, y que ahora gana terreno en Sudamérica.
Pampas y Cristales: proyectos renovables de nueva generación
El proyecto Pampas se concibe como un complejo híbrido que integra:
- 128 MW eólicos.
- 229 MW solares fotovoltaicos.
- 340 MW en sistemas de almacenamiento de energía (BESS).
Por su parte, Cristales contempla:
- 288 MW de generación solar.
- 340 MW en baterías de litio, con una autonomía estimada de 3 a 4 horas, lo que se traduce en más de 1.000 MWh de capacidad de respaldo.
Ambos proyectos destacan por su diseño híbrido, en el que se combina generación renovable con almacenamiento, permitiendo que la energía solar y eólica captada durante las horas de mayor producción pueda inyectarse al sistema eléctrico en periodos de alta demanda, incluso durante la noche.
Este enfoque no solo optimiza el uso de los recursos renovables, sino que reduce la dependencia de centrales fósiles de respaldo. En palabras de Javier Dib, CEO de AES Andes, “estas inversiones refuerzan nuestro compromiso con la transición energética del país y con la Región de Antofagasta, aportando sostenibilidad y seguridad al sistema eléctrico”.
Comparativa técnica de los proyectos Pampas y Cristales
Además de Pampas y Cristales, AES Andes avanza en otros tres proyectos clave en la Región de Antofagasta que consolidan su liderazgo en almacenamiento renovable. El primero es Arenales, un sistema de baterías de 300 MW diseñado como infraestructura independiente de respaldo energético. A este se suma Bolero BESS, con 146 MW asociados a un parque solar ya existente, lo que permite aprovechar excedentes y dar mayor flexibilidad al sistema. Finalmente, Andes Solar III combina 171 MW solares con 171 MW en baterías, integrando generación y almacenamiento en un mismo complejo. Con estos desarrollos, la compañía alcanza más de 2.100 MW en construcción, configurando a Antofagasta como el epicentro de la transición energética en Chile.
Una apuesta que transforma la matriz energética chilena
Chile lleva más de una década consolidando su posición como líder en renovables en América Latina. De acuerdo con la Comisión Nacional de Energía, más del 60 % de la capacidad instalada proviene ya de fuentes limpias. Sin embargo, la intermitencia de la generación solar y eólica sigue siendo un reto.
La incorporación de AES Andes Antofagasta energía renovable con almacenamiento abre una nueva etapa en la transición energética de Chile, al integrar generación limpia con respaldo de baterías. Esta tecnología convierte al país en un laboratorio de soluciones que podrían replicarse en otros mercados de la región.
Impacto social y económico en Antofagasta
Más allá de la innovación tecnológica, la construcción de estos proyectos tendrá un impacto directo en el empleo y el desarrollo local. Se estima que se crearán más de 1.400 puestos de trabajo durante la fase de obras, con preferencia de contratación para trabajadores de la zona.
Asimismo, los proyectos demandarán servicios locales de ingeniería, transporte, logística y construcción, generando un efecto multiplicador en la economía regional.
Este enfoque no es nuevo: en artículos anteriores de Habitaro ya hemos analizado cómo los megaproyectos energéticos en Latinoamérica generan oportunidades de inversión y empleo en sectores clave. Un buen ejemplo es el análisis de los megaproyectos 2025 en LATAM, donde destacamos cómo estas infraestructuras transforman economías regionales. En el caso de Antofagasta, además, se refuerza el posicionamiento de la región como un polo energético estratégico que combina minería, energías renovables y exportación de hidrógeno verde.
¿Qué significa el almacenamiento de energía para Chile?
La clave de estos proyectos está en el almacenamiento de energía en Chile, que permite almacenar electricidad en horas valle y entregarla en horas punta. Este avance tiene tres beneficios principales:
- Mayor seguridad energética: reduce la dependencia de combustibles fósiles importados.
- Flexibilidad operativa: estabiliza la red y evita caídas de tensión o sobrecargas.
- Sostenibilidad ambiental: alivia la presión sobre los sistemas térmicos de respaldo, reduciendo emisiones.
La apuesta de AES Andes conecta directamente con la estrategia nacional de descarbonización, que busca cerrar todas las centrales a carbón antes de 2040. Además, se alinea con el impulso a ciudades resilientes y sostenibles, un tema que hemos analizado en profundidad en el artículo sobre infraestructura verde y habitabilidad urbana.
Conclusión: AES Andes Antofagasta energía renovable con almacenamiento
El inicio de construcción de los proyectos Pampas y Cristales marca un hito en la AES Andes Antofagasta energía renovable con almacenamiento, consolidando la posición de la región como líder en innovación energética. Con 1.325 MW de capacidad renovable e integrada a baterías, AES Andes no solo refuerza su liderazgo en el sector, sino que también impulsa un modelo energético más sostenible, flexible y resiliente.
Este avance confirma que Chile, y en particular la Región de Antofagasta, se consolidan como referentes en la implementación de energía renovable con almacenamiento, un pilar fundamental para alcanzar la carbono neutralidad y un ejemplo a seguir en Latinoamérica.
Preguntas frecuentes sobre el proyecto AES Andes en Antofagasta
En conjunto, aportan 1.325 MW renovables, de los cuales 955 MW corresponden a generación solar y eólica, y 680 MW a sistemas de almacenamiento en baterías.
AES Andes calcula que la producción será equivalente al consumo de más de 780.000 hogares, reforzando la seguridad del Sistema Eléctrico Nacional.
Porque permite inyectar energía limpia incluso cuando no hay sol ni viento. En el caso de Antofagasta, la energía renovable con almacenamiento aportará flexibilidad y estabilidad en un sistema que ya supera el 60 % de participación renovable.
Generará más de 1.400 empleos durante la construcción, fomentará la contratación local y dinamizará sectores asociados como ingeniería, transporte y servicios.