Energías renovables en Latinoamérica 2025: avances reales, barreras críticas y oportunidades de inversión

Vista aérea realista de paneles solares y turbinas eólicas en un paisaje rural de América Latina

Energías renovables en expansión en América Latina (imagen generada por IA, estilo fotográfico)

Las energías renovables en Latinoamérica en 2025 se encuentran en un momento clave: la región tiene la matriz eléctrica más limpia del mundo, pero también grandes brechas en inversión, planificación e infraestructura. En este artículo analizamos qué países lideran, qué barreras impiden avanzar y dónde están las oportunidades reales para transformar el modelo de las energías renovables en Latinoamérica 2025.

Un continente con energía limpia… pero desigual

Mientras Brasil genera el 88% de su electricidad a partir de fuentes renovables, México apenas supera el 21%. Uruguay es el único país con cobertura 100% renovable. La dependencia de la energía hidráulica es significativa, pero las sequías asociadas al cambio climático están obligando a diversificar.

Según la IEA, Latinoamérica genera más del 60 % de su electricidad a partir de renovables, lo cual supera ampliamente el promedio mundial. Sin embargo, ese liderazgo es frágil si no se invierte en almacenamiento, redes inteligentes e integración regional.

Tabla comparativa por país (actualizada a 2025)

País% RenovablePrincipales fuentesProyectos claveObstáculos destacados
Brasil88%Hidro, solar, eólicaSubastas, biomasaSaturación de red, licencias
Chile63%Solar, eólica, hidroH₂ verde, baterías, HVDCCurtailment solar, congestión
Colombia74%Hidro, solar, eólicaLa Guajira, subastasConsulta previa, permisos
México21%Hidro, solar, eólica, geotérmicaIstmo eólico, Baja CaliforniaReforma eléctrica, saturación
Argentina28%Eólica, solar, hidroRenovAr, PatagoniaMacro inestable, poca inversión

Más información sobre el parque eólico Windpeshi en Colombia y los proyectos de La Guajira.

Redes para energías renovables en Latinoamérica 2025

La mayoría de países latinoamericanos no han modernizado sus redes para evacuar toda la energía generada por parques solares o eólicos. Casos como Chile y México muestran cómo el exceso de oferta renovable no puede aprovecharse por falta de infraestructura.

Las soluciones en marcha incluyen:

  • Nuevas líneas de alta tensión (como Cardones–Polpaico en Chile).
  • Proyectos binacionales como Brasil–Uruguay o Colombia–Ecuador.
  • Redes inteligentes que permiten gestionar picos de demanda.
  • Sistemas de baterías a gran escala (proyectos piloto en Chile, Brasil, Uruguay).

Profundiza en esta línea en nuestro artículo sobre infraestructura verde y habitabilidad urbana.

Hidrógeno verde en Latinoamérica 2025: potencial y proyectos clave

En 2025, el hidrógeno verde se consolida como una de las apuestas más ambiciosas de América Latina. Países como Chile, Brasil y Colombia han presentado hojas de ruta y ya atraen inversión extranjera.

  • Chile lidera con proyectos en Magallanes, con una capacidad proyectada de 25 GW a 2030. El BID y la UE han comprometido fondos significativos.
  • Brasil avanza en el corredor de Pecém, con interés de compañías alemanas y acuerdos bilaterales con la Unión Europea.
  • Colombia prevé producir 1 millón de toneladas de H₂ verde para 2030, con proyectos en el Caribe y el Pacífico.
  • Uruguay lanzó su primer piloto de amoníaco verde con respaldo estatal y privado.

El hidrógeno verde no solo permitirá descarbonizar sectores industriales, sino también posicionar a la región como exportadora de energía limpia hacia Asia, Europa y EE. UU.

Financiamiento verde para la transición energética en LATAM

Entre 2016 y 2025, Latinoamérica ha emitido más de 50.000 millones de USD en bonos verdes. Destacan:

  • Chile con 34.500 MUSD en bonos soberanos sostenibles.
  • Brasil, como mayor emisor corporativo del continente.
  • Colombia y México, con emisiones emergentes destinadas a infraestructura y eficiencia energética.

Además, bancos multilaterales como CAF, BID y Banco Mundial están financiando líneas específicas para baterías, redes inteligentes, movilidad eléctrica y sistemas de medición avanzada.

Oportunidades y tecnologías emergentes

Además del hidrógeno verde, la región está explorando tecnologías como:

  • Renovables distribuidas: techos solares, microrredes rurales.
  • Almacenamiento avanzado: baterías de flujo, sales fundidas.
  • Digitalización energética: IoT, sensores inteligentes, blockchain para trazabilidad.
  • Desalinización con energía renovable: en zonas costeras de Perú y Chile.

Estas tecnologías, si se implementan con equidad territorial, podrían cerrar brechas de acceso y consolidar un nuevo paradigma energético.

Transición justa en Latinoamérica: participación, empleo y derechos territoriales

Una transición energética exitosa no es solo técnica, sino social. En la última década, decenas de proyectos han sido paralizados por falta de consulta previa o por impactos territoriales negativos.

Claves para una transición justa:

  • Respeto al Convenio 169 de la OIT.
  • Participación real de comunidades originarias y rurales.
  • Redistribución de beneficios (empleo, propiedad, tarifas justas).
  • Políticas con enfoque de género y justicia intergeneracional.

Sin estas condiciones, la transición energética podría reproducir desigualdades estructurales en vez de resolverlas.

Conclusión

Las energías renovables en Latinoamérica 2025 representan una ventana única para el desarrollo sostenible. La región tiene los recursos, pero necesita voluntad política, estabilidad normativa e inclusión social para avanzar.

Si se consolida esta visión, Latinoamérica puede no solo descarbonizar su matriz, sino también convertirse en un proveedor estratégico de energía limpia para el mundo.

Preguntas frecuentes

¿Cuál es el país con mayor inversión en renovables en 2025?

Chile lidera por su apuesta en H₂ verde, seguido por Brasil.

¿Qué rol tienen los bancos multilaterales?

Financian redes, baterías, electrificación rural y proyectos climáticos de alto impacto.

¿Qué energías renovables tienen más potencial en la región?

Solar y eólica en zonas áridas, geotermia en el cinturón volcánico, biomasa en áreas agrícolas y forestales.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *